Las personas sordas se encuentran a diario con barreras de acceso a
la comunicación e información que dificultan su participación plena
en el entorno circundante. La accesibilidad a la información y la
comunicación supone tener en cuenta aspectos tales como la lengua de
signos española o, en su caso, catalana, el subtitulado, la
alternancia de señales, el incremento de la visibilidad, etc. En
definitiva, una serie de medidas donde, entre otros, los
aspectos visuales se configuran como fundamentales en el
contacto de las personas sordas con el medio, como son: